Salve dolorosa y afligida madre
Salven sus dolores y a todos
nos salven
El jueves de santo se hace la procesión con la imagen de Jesús crucificado. En la misa se realiza la última cena; también antes de entrar la procesión hay unas cortesías (que las mesas donde van las imágenes llevadas por devotos en los hombros chocan palo con palo), donde la imagen de Jesús y la Dolorosa se encuentran de frente. En este momento los feligreses guardan un minuto de silencio y no se aplaude. Dicen los abuelos que esto se hace por que era como una despedida entre ellos ya que el día viernes muere Jesús. Cuando ya procesión termina se canta la Salve a la Dolorosa.
El viernes santo se prepara el Santo Sepulcro para la procesión, los hermanos de la sociedad, introducen velas a la mesa donde va la imagen, que luego serán repartidas a las personas que asistan a la procesión de retiro. Este día la procesión va acompañada con la Cruz con su túnica y la Pasión (esto son 15 jóvenes y niñas todas vestidas de blanco, cuatros que llevan las cintas blancas que van colocadas en la esquinas del sepulcro y las otras 11 jóvenes entre ella la que hace el papel de la Verónica, toda de negro y rostro cubierto, llevando en sus manos un cuadro con el rostro de Jesús. El resto de las niñas llevan cuadros que representan toda la Pasión, muerte y resurrección de nuestro señor Jesús. También otro grupos de niñas pequeñas se visten de Ángeles). Todos estas niñas y jóvenes se reúnen en una casa de familia alejada del templo al salir se hacen dos filas y en el medio va la Verónica mirando hacia abajo, que nadie sabe quien es, sino hasta que la procesión entre y se cante La Salve se le descubre el rostro a la joven.
Esta pasión pasa por toda la calle principal del pueblo hasta llegar al templo viene acompañadas de un guía y música de marcha fúnebre, al llegar este grupo de jóvenes al templo se preparan para que la procesión con el santo sepulcro que va custodiado por dos guardias uno con una espada colonial y el otro con un machete, uno por cada lado, la cruz con su túnica, San Juan y la Dolorosa empiecen su recorrido. El viernes santo en el día el templo permanece abierto pero en custodia (hombres con machetes sentados en cada puerta), en el medio del templo se coloca un crucifijo con una vela como señal de respeto y en recuerdo de la muerte de Jesús. Todas las imágenes del templo 
permanecen cubiertas por un manto blanco desde el jueves por la noche cuando se hace el monumento para la Adoración al Santísimo. A las 08:00am y 03:00pm se dan repiques de campanas dobles como señal de duelo. También se realiza el vía crucis escenificados con niños por la calle principal para se le avisa a cada persona que le va a tocar una estación que coloquen frente a su casa un pequeño altar con una mesa, una luz y un crucifijo, allí se lee y se medita cada estación acompañados de un canto propicio para ese día esto se hace por la mañana. En la tarde un grupo de jóvenes y adultos de la comunidad realizan un vía crucis que ya ha tomado mucha importancia en algunas partes del estado, ellos se preparan con mucho sacrificio y con la colaboración de la comunidad en general para llegar a cada uno de los corazones que nos visitan. El sábado de gloria se realiza la fogata y la bendición del fuego como signo de la resurrección de Jesús, se enciende el sirio pascual luego de la ceremonia del sacerdote, los fieles encienden velas, de allí se entra al templo en procesión el cual permanece a oscuras, para la celebración de la santa misa esperando el momento oportuno para encender las luces y apagar las velas.
Ya esto es una tradición del pueblo de El Pilar que se remonta a casi los mismos años de la fundación del pueblo. Las imágenes de la Dolorosa, el eccehomo, el Nazareno, San Antonio, la Inmaculada, el Sepulcro que actualmente se encuentran en el templo se remonta a más de un siglo.
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